Es la aurora de un nuevo día y los primeros saltos de luz de la mañana sobre el horizonte oriental.
¡Qué hermoso es que es la luz después de la oscuridad de una noche muy larga espiritual.
Despierta, de su letargo espiritual, abre los ojos y dejar que la luz de
la verdad brille de Dios en elevar su espíritu y su alma.
No estamos en el momento de la puesta de sol; nos estamos acercando al momento de la Gran Salida del sol.
Hermanos, esto no está en el final de las cosas, pero sólo en el comienzo del Día de la Luz de Dios.
De ese día no habrá fin.
Cuando su luz brillante brilla la sombra de oscuridad huye.
Todas las criaturas de luz irrumpirá con cantos y Joybells sonarán en sus corazones cuando por fin Jesucristo no venir.
Alégrate! Alégrate!
Deje que los niños de todo el dios cantar Aleluya!